Los estados de ánimo en la adolescencia son cambiantes, sin embargo es recomendable realizar una evaluación profesional si observa un patrón constante de:

-Irritabilidad

-Tristeza

-Retraimiento

-Abandono de las cosas que antes le gustaba hacer

-Cambios en el apetito, sueño o en el rendimiento académico

La evaluación brinda orientación tanto para los padres como para el adolescente, y brinda la oportunidad de intervenir a tiempo, evitando la posibilidad de que se instaure un cuadro depresivo más grave.

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